A los 31 años, Azucena decide buscar al hijo que abandonó al quedar embarazada a los 13. Julio, un joven de 18 años, pasa su último año en el orfanato y ambos parecen de la misma edad. Azucena decide que él es. La ira, el síndrome de Edipo, la ternura, marcan el aroma de La Hiedra.